Gelabert entregaba cada día al Doctor Sarró una cuartilla con escritos y dibujos que él llamaba “tegrama” y que iba dirigida a Dios. En palabras de Gelabert un “tegrama” es un medio que se utiliza para comunicarse con la divinidad, a diferencia de un telegrama que sirve para relacionar a los hombres entre sí.
Gelabert vivía en un continuo éxtasis cosmogónico que conciliaba con las labores, más mundanas, que le habían sido asignadas en el asilo y que estaban relacionadas con su profesión de fontanero.
Desde su misión de “representante interino-intermitente, del pueblo ignorante y pagano” Gelabert encontraba mensajes divinos en cada rincón de su pequeño mundo. La naturaleza del patio del manicomio era su principal fuente de revelaciones. Las encontraba en el vuelo de un insecto, en las nubes, en la dirección del camino de una oruga… pero sobre todo en los números, especialmente en los de la primera docena –ya que más allá de ahí la divinidad no se interesa¬– según explicaba.
En una ocasión creció una planta en medio del patio de forma espontánea. Era una tomatera. En sus frutos y número de hojas Gelabert encontró la revelación que explicaba la comunión entre el cielo y la tierra.
A propósito de Gelabert, el doctor Ramón Sarró señaló la tendencia de tomar lo local para referenciar la totalidad en los delirios parafrénicos.
En realidad, todos los seres humanos nos servimos de nuestro pensamiento simbólico para interpretar el mundo a través de lo que conocemos. Gelabert sólo muestra esta tendencia llevada a tal extremo que nos permite observarla al desnudo. De la misma manera que el jardín del manicomio se convierte en el centro del mundo que produce diariamente símbolos que expresan el destino del mundo, todos derivamos conclusiones globales a partir de experiencias concretas en nuestro pequeño mundo. Es una manera de sostener la convivencia con la incertidumbre y el caos.
Fuentes:
HERNÁNDEZ MERINO, A. (2000): De la pintura psicopatológica al arte como terapia en España, 1917-1987. Universidad Politécnica de Valencia.
SARRÓ BURBANO, R. (1994): De la teoría mitologemática al homo demens (recopilación de MEDIAVILLA, J. L.; GIMENO, Barcelona, E. Policrom S. A.